De vuelta
Ya estoy aquí, el inefable ha regresado. Después de unos días saboreando el infinito bajo un auténtico cielo y sin el amargo sabor de la soledad, llego de nuevo al encuentro de mi medio de pago de facturas. ¿Quién me diría a mí que el tiempo se puede detener? Esa mente angulosa que cargo está perpleja por la capacidad de sentimientos irracionales que puede tener. Para ella es nuevo mirar al cielo y sentirse iluminado sólo con el resplandor de la estrella de la tarde.
Debería ser obligatorio escuchar el mar con cierta frecuencia. El sonido primordial limpia el alma por muy sucia que esté. Y si se está rodeado de la gente que quieres más aún. Incluso pareciera que es posible separar por unos instantes la cabeza un poquito más del suelo.
Salud.
Debería ser obligatorio escuchar el mar con cierta frecuencia. El sonido primordial limpia el alma por muy sucia que esté. Y si se está rodeado de la gente que quieres más aún. Incluso pareciera que es posible separar por unos instantes la cabeza un poquito más del suelo.
Salud.
5 comentarios
Minyatur -
Besos y abrazos para todos.
DuNa -
Me encanta! :.)
Sory -
Minyatur -
Tengo trilladísimo el repertorio de efectos del ron, y ninguna es ni de lejos algo de tranquilidad.
Saludos.
Luiyo -